Deseo estar haciéndolo bien.

Tengo que confesar que yo era la mejor mamá del mundo, era la madre perfecta hasta que tuve a mis hijos. He descubierto que ni soy perfecta, ni soy la mejor y es que en cuanto nace un bebé todo el mundo tiene una opinión, la tía, la abuela, la prima, la amiga y uno se siente un poco invadido en su espacio, creo que a veces la gente debería entender qué cada maternidad, que cada mujer y que cada hijo son diferentes. Cada una lo va a vivir de diferente modo ya sea un hijo natural, un hijo adoptado o un hijo que la vida se encargó de poner en nuestros brazos, por diferentes motivos y diferentes circunstancias, todos somos expertos en crianza de niños que no son nuestros ¿Pero qué tal cuando tienes a tus propios bebés? Desde cambiarle el pañal, el biberón, lactancia a libre demanda, las papillas, las vacunas tantas opciones y tantas opiniones al final ya decidí seguir Mi instinto y para mí en mi caso particular ha sido lo mejor yo soy una mamá loca obsesiva compulsiva que desde momen...