¿A quién le importa? ¿Debería de importarme?

Conforme vamos creciendo la necesidad de aprobación de quienes nos rodean, nos importa y a veces más de la cuenta, obviamente de niños la aprobación que buscamos es la de nuestros padres. Más grandes de nuestros compañeros de colegio, de trabajo, en fin del círculo en el que nos desenvolvemos. Y así, cuando contamos nuestros planes más de uno nos preguntarán ¿Enserio? ¿Para qué?¿Estás seguro? ¿No crees que es muy difícil? Como cuando después de entrenar 3 o 4 meses te inscribes a una carrera, la cara de incredulidad de las personas, muchas veces ni siquiera es preciso que digan nada, es como si de repente pudieras leer la mente... ¿A tu edad? En ese entonces tenía 39 ¿Con esa panza? La sigo teniendo ¿No tienes cuerpo de corredora? Tengo 2 piernas que funcionan bien, soy una corredora. Con el tiempo aprendemos a hacer nuestras cosas en silencio, para no tener que dar explicaciones de ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Dónde? ¿Por qué? ¿Para qué? ¿Con quién? y aun así nunca falta el que pregunt...